“Mala idea”. Esta es la opinión que surgió al interior de las distribuidoras eléctricas al conocer la intención del gobierno de modificar el sistema de tarificación del sector, a través de una Ley Corta III.
Un alto ejecutivo del área señaló que la autoridad debería centrar su atención en “otras prioridades que son mucho más dramáticas para el país” y puso como ejemplo los altos precios de la energía, producto del uso de combustibles de mayor precio -como el diesel-, en la generación, y la falta de nuevos proyectos que permitan contar con mayor capacidad en los sistemas eléctricos. Esto último, a juicio de las fuentes, permitiría superar la estrechez de abastecimiento en la zona central y norte del país.
En esta línea, el gerente general de Chilectra, Rafael López Rueda, dijo ayer que no ve la necesidad de hacer la modificación en este momento, ya que, en las condiciones actuales, la ley funciona bien y además ya comenzó el proceso de tarificación que culminará a fines de 2008 y regirá entre 2009 y 2012.
Sin embargo, indicó que aunque nadie puede oponerse a mejorar las cosas, “los problemas del sector energético en Chile no están en la distribución de electricidad o la regulación de la distribución”.
La iniciativa del gobierno, que coincide con una moción parlamentaria, apunta a cuatro puntos centrales: que sea el Panel de Expertos el que se pronuncie ante las discrepancias que surjan entre las propuestas públicas y privadas; que la tasa de capital deje de ser fija durante los cuatro años de la fijación; también se va a perfeccionar el sistema de tarificación de servicios asociados y el mecanismo de verificación de rentabilidad. Leer más.
Un alto ejecutivo del área señaló que la autoridad debería centrar su atención en “otras prioridades que son mucho más dramáticas para el país” y puso como ejemplo los altos precios de la energía, producto del uso de combustibles de mayor precio -como el diesel-, en la generación, y la falta de nuevos proyectos que permitan contar con mayor capacidad en los sistemas eléctricos. Esto último, a juicio de las fuentes, permitiría superar la estrechez de abastecimiento en la zona central y norte del país.
En esta línea, el gerente general de Chilectra, Rafael López Rueda, dijo ayer que no ve la necesidad de hacer la modificación en este momento, ya que, en las condiciones actuales, la ley funciona bien y además ya comenzó el proceso de tarificación que culminará a fines de 2008 y regirá entre 2009 y 2012.
Sin embargo, indicó que aunque nadie puede oponerse a mejorar las cosas, “los problemas del sector energético en Chile no están en la distribución de electricidad o la regulación de la distribución”.
La iniciativa del gobierno, que coincide con una moción parlamentaria, apunta a cuatro puntos centrales: que sea el Panel de Expertos el que se pronuncie ante las discrepancias que surjan entre las propuestas públicas y privadas; que la tasa de capital deje de ser fija durante los cuatro años de la fijación; también se va a perfeccionar el sistema de tarificación de servicios asociados y el mecanismo de verificación de rentabilidad. Leer más.
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